Por tanto el tarot no muestra un futuro cerrado, nosotros somos en última instancia quienes decidimos que camino tomar y que futuro vivir.
Nunca las cartas nos imponen un futuro, por ello decimos siempre que el tarot aconseja a través de la tarotista que es la persona encargada de canalizar las energías de la consultante, transmitirla a las cartas, y a partir de ahí aconsejar sobre los caminos a tomar.
Las videntes y tarotitas son quienes aconsejan a las consultantes acerca de como deben actuar. La experiencia de la vidente es la que ayudará a la consultante a tomar las decisiones correctas.
Pueden apoyarse en la baraja del tarot, la lectura de conchas, el péndulo o en otras mancias para poder visualizar lo que está por venir.